Diabetes y salud bucodental

Cuando hablamos de la diabetes, muchas veces nos olvidamos de sus efectos en la boca, ya que la cavidad oral de los diabéticos tiene más riesgo de desarrollar patologías en las encías o los dientes, incluso con pérdida de piezas dentales. Es por eso que hoy te contamos qué trastornos bucodentales van ligados a la diabetes y te decimos cómo prevenirlos.

En las personas diabéticas, los dientes y las encías son una parte del cuerpo que suele sufrir especialmente los efectos de la enfermedad. Por lo tanto, un buen cuidado y una buena higiene bucodental es aún más fundamental en las personas diabéticas. Existe una relación clara, directa y recíproca entre la diabetes y las enfermedades de las encías. No solo los diabéticos tienen más riesgo de sufrir una enfermedad periodontal  (3 o 4 veces más que el resto), sino que la presencia de trastornos en las encías pueden identificar precozmente el desarrollo futuro de esta enfermedad.

¿Cómo afecta la diabetes a la salud dental?

Una persona diabética, si no se trata adecuadamente, tiene una mayor susceptibilidad a las infecciones, boca seca, halitosis y retraso en la cicatrización de las heridas, entre otros problemas bucales.

Sufrir una infección en las encías, como la gingivitis o la periodontitis, también puede afectar a los niveles de azúcar en sangre. Por eso, tener unos hábitos de higiene dental correctos puede ayudar a mantener una buena salud bucodental y a controlar la diabetes.

Las enfermedades periodontales son más frecuentes y suelen estar más avanzadas en diabéticos. Una buena higiene oral será fundamental para estos pacientes. La periodontitis puede ser un primer signo de diabetes y, si no se controla, puede hacer que empeore. Por otro lado, un buen tratamiento de las enfermedades de las encías puede mejorar el control de la diabetes.

Problemas bucodentales que más afectan a las personas diabéticas

Periodontitis

Muchos estudios apuntan que las personas con diabetes tienen mayor probabilidad de sufrir trastornos en las encías, generalmente debido a que son más susceptibles a desarrollar infecciones bacterianas y tienen menos capacidad para combatirlas. Es por eso que es común que las personas con diabetes sufran gingivitis (la enfermedad de las encías en su etapa inicial, caracterizada por inflamación y sangrado debido a la acumulación de placa bacteriana) o enfermedad periodontal (en una fase más avanzada, cuando el trastorno evoluciona a pérdida de hueso alrededor de los dientes). Además del daño que provoca esta patología en las encías y el hueso que sujeta los dientes, la periodontitis podría dificultar el control de la glucosa en la sangre, es decir, esta afección podría contribuir al avance de la diabetes.

Pérdida de dientes

El mayor riesgo de sufrir trastornos en las encías es que puede desencadenar en la pérdida de piezas dentales. Se estima que uno de cada cinco casos de pérdida de dientes está vinculado con la diabetes, según datos de la Asociación Dental Americana.

Sequedad bucal

Es muy común que la diabetes vaya ligada también a la sequedad en la boca. La falta o disminución de la saliva es un problema importante, porque este líquido que en condiciones normales se segrega durante las 24 horas del día, tiene funciones importantes, como lubricar los labios y la mucosa bucal, eliminar restos de comida…. favoreciendo la higiene bucodental. La diabetes puede también alterar la composición de la saliva, elevando sus niveles de glucosa.

¿Cómo se pueden controlar los trastornos orales?

Aunque hay ciertos signos que pueden advertir la presencia de problemas en la boca, como el sangrado de encías, las encías rojas, hinchadas y sensibles, el mal aliento…, lo mejor siempre es prevenir la aparición de cualquier trastorno de la siguiente manera:

  • Controlar el nivel de glucosa en la sangre.
  • Cepillarse los dientes y usar seda dental a diario, contando también con la ayuda de los cepillos interdentales.
  • Acudir con regularidad al dentista, indicándole siempre que tienen diabetes.
  • Dejar de fumar, puesto que el tabaco afecta de manera muy negativa a las encías.
  • Inspeccionarse periódicamente la boca y ante el menor indicio de cualquier problema, ir al especialista.
  • En el caso de usar dentaduras postizas o prótesis, hay que sacarlas y limpiarlas a diario. También se debe comprobar que se ajusten bien, sin provocar roces o heridas.

¿Por qué debes acudir al dentista?

En nuestra clínica, podemos contribuir al diagnóstico precoz de la diabetes y, con los cuidados necesarios, ayudar a que control de la enfermedad sea más efectivo. Es importante acudir al dentista si se detectan síntomas como encías enrojecidas, inflamadas, sensibles o que sangran con facilidad.

Si tienes cualquier duda sobre cómo puede afectar la diabetes a tu salud oral, no dudes en ponerte en contacto con nosotros. Nos encontrarás en Carrer de Jaume Casanovas 45, el Prat de Llobregat.

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